El doctor Jesús Aumaitre, presidente del Colegio de Veterinarios de Delta Amacuro, informó que desde esta institución y como profesionales del área ven con preocupación que el período de vacunación contra la brucelosis y fiebre aftosa programada desde el 15 de abril, todavía en el Delta no se haya iniciado.
Aseguró que Venezuela es el único país del Cono Sur que aún con programas de vacunación no es libre de aftosa y que el Delta siendo un importante productor de búfalos no pueda exportarlos ni los animales ni sus productos, ya que es una condición obligada estar libre de esta enfermedad.
«La presencia de brucelosis limita a la región a participar en materia de exportación de productos y subproductos del ganado bovino que incluye vacuno y bufalino», explica Aumaitre que los mercados europeos son muy exigentes en cuanto a este tema de la ausencia de enfermedades.
Según el médico veterinario el mercado bufalino ha venido creciendo como raza exótica y se hace apetecible en esos mercados y preocupa que ha pasado casi un mes y no ha comenzado la vacunación. No hay movimiento y el programa es hasta el 15 de junio, fecha improrrogable, perdiéndose el «veranito» antes de que comiencen las lluvias.
Aumaitre aseguró que además de estas dos enfermedades se suma la tuberculosis. Referente a esto hay que hacer lo que se denomina tuberculinización que no es sino detectar los factores positivos y llevarlos a matadero, y hay que hacerla 20 días antes de la vacunación.
Como profesional del área hace un llamado a los productores a acercarse al Colegio de Veterinarios para informarse sobre la inmunización de los rebaños. La idea es coordinar la tuberculinización, lo relativo a la vacunación contra brucelosis, campañas que son antañas en el país pero que desafortunadamente estamos conviviendo con ellas.
La razón anteriormente era porque aquí no se producía vacunas, había que importarlas, la única que se producía era la cepa 19, muy limitada y por eso esas campañas se han alargado tanto.
En cuanto a la zoonosis el consumo de carne no es el riesgo, la vía de trasmisión es sobre todo la leche, la carne es difícil que se trasmita pero de todos modos se recomienda cocinar bien las carnes y no consumir vísceras crudas. Estas son bacterias que a los 70 grados se inhabilitan.
En el caso de la tuberculosis sí se puede trasmitir por el consumo de carne o ganglios que tengan los nódulos tuberculosos y la leche pues pasteurizada para evitar el contagio de brucelosis.
Comentó Aumaitre que recientemente se detectaron unos casos de tuberculosis positivos en un matadero en Cojedes y los dejaron para el final de la faena ya que son animales que pueden infectar a los matarifes. La que tenemos en el estado es mas bien producto de la mala alimentación sobre todo en la población indígena.
Informó el presidente del Colegio de Veterinarios que el gobierno acaba de crear un nuevo programa que se llama Sigesai y desde la sede e en calle Delta hay una secretaria que puede ayudarlos ya que para sacar una guía o un certificado de vacunación deben estar inscritos en el Sigesai. Es un registro obligatorio debe escanear las facturas , el veterinario que fue a la finca y de esa manera le va a arrojar el acta de vacunación. Si no cumple con los requisitos la página no le va a dar la guía de movilización.
Se le hace un llamado a los productores porque a veces no quieren hacer una inversión para sanear los animales, no lo ven como inversión entonces lo que optan es por malograr los animales traen los animales muertos a la carnicería, entonces en estos casos las autoridades no permitan ese tipo de matanzas está fuera de la Ley. Todo animal debe ir a una sala de matanzas.
«Hay que sanear, no podemos pasar toda la vida haciendo pruebas porque uno que se deje de vacunar tendremos siempre la latencia de la enfermedad. Aunque se tenga un solo animal hay que vacunarlo por el bien de la salud animal, por el bien de la salud pública, un animal una vacuna», finalizó Jesús Aumaitre.