Deltanos todos los días están a la expectativa de una crisis social que recrudece en Tucupita, así como en todo el país.
“La cosa está más ruda”, esta frese resuena en una mayoría de los ciudadanos, al caminar las calles, todos los días.
Se trata de la coyuntura generada por el alto costo de los productos básicos y un salario muy por debajo de lo que se necesita para cubrir estos gastos.
Cada vez los rostros de preocupación en los más vulnerados, es notorio, sobre todo, para quienes poseen un ingreso otorgado por una institución de gobierno.
“No tengo nada para comer hoy”, esta frase es típica oírla apenas das una charla con un conocido, por breves segundos.
El salario minino de un trabajador se ubica en 1 millón 200 mil bolívares, quincenal.