Dos jóvenes, no mayores de los 20 años de edad han fallecido tras recibir impactos de bala de las que se presumen, habrían sido accidentalmente.
Los incidentes han ocurrido en menos de los dos primeros meses de este año 2021.
9 de enero
La primera víctima se recuerda a Julián Barrera de 20 años de edad, quien permanecía bajo custodia en el retén de Guasina tras estar siendo investigado por presuntos delitos de trata de personas.
Se presume que el joven manipulaba un arma de fuego de fabricación no industrializada, este se le habría disparado accidentalmente en la cabeza, lo que ameritó su traslado de inmediato al hospital de la ciudad de Tucupita, sin embargo, la gravedad obligó que lo llevaran a Maturín, estado Monagas.
Barrera no resistió y murió en su traslado, en Temblador del estado Monagas. Este hecho luego trajo controversias. Sus familiares responsabilizaron a las autoridades por la tragedia y exigieron se investigue más a fondo lo sucedido. Ellos afirmaban que Julián no era un traficante de personas, ni menos, un integrante de una banda delictiva.
3 de febrero
Luis Salazar, de 19 años de edad, aparentemente compartía con su compañero minutos antes de la tragedia. Él era un funcionario de la Policía Nacional Bolivariana y perdió su vida la madrugada del miércoles 3 de febrero en el sector Cafetal de Tucupita, en el estado Delta Amacuro, según la versión oficial.
El funcionario ingresó sin signos vitales al hospital Dr. Luis Razetti de la entidad deltana tras recibir un impacto de bala, en el intercostal derecho, por su propio compañero también de este mismo organismo de seguridad, a quien se le habría accionado su arma de reglamento accidentalmente.