La semana radical de cuarentena prohíbe la circulación de transporte público y privado, lo que genera el aislamiento total de las comunidades alejadas al centro de Tucupita
Vecinos de la parroquia Juan Millán (sur de Tucupita) parecen no adaptarse al sistema 7+7 que ha empleado el Ejecutivo nacional para intentar frenar la propagación del nuevo coronavirus, que implica tener una semana de flexibilización y otra radical respectivamente.
Y es que, la lejanía que están estas comunidades del centro de Tucupita ha ocasionado que las familias no tengan acceso a sus medicamentos y comida.
¿Por qué está en riesgo la salud de las familias?
Los establecimientos farmacéuticos se encuentran todos, o casi todos en el centro de Tucupita. Esto ha llevado a que las personas que viven en las zonas apartadas al casco central de la capital deltana, como los de la parroquia Juan Millán, no tengan acceso a sus medicamentos.
Se ha verificado que actualmente, una gran cantidad de personas en el centro de Tucupita, presenta fiebre y dolores de cabeza. La parroquia Juan Millán no es la excepción, el cual amenaza seriamente la salud de sus habitantes.
De igual manera, empleados de algunas farmacias aseguran que en las últimas semanas han tenido una alta demanda en productos antigripales.
Caminar durante varias horas para intentar abastecerse de los productos básicos
Estas familias de la parroquia Juan Millán han intentado solventar sus carencias, aunque esto implique tener que caminar durante varias horas para llegar al centro de Tucupita y poder abastecerse de los rubros de primera necesidad, tanto de insumos médicos, como de comida.
El “gran” obstáculo de quienes intentan trasladarse al centro de Tucupita
El no tener transporte ya lo hace difícil, sin embargo, más aún lo hace el punto de control de la Guardia Nacional, en la comunidad Agua Negra. Para los habitantes de Carapal de Guara, este ha sido el mayor obstáculo.
Los mismos vecinos aseguran que los funcionarios les niegan el paso peatonal, alegan solo los que poseen un salvoconducto están autorizados.
“Muchos caminan de comunidad en comunidad para ver si consiguen una cola para llegar al centro, pero en Agua Negra los bajan porque dicen que solo los que tienen salvoconducto están autorizados. Muchos se regresan con las manos vacías, es un abuso ya que todos los negocios y farmacias están en el centro”, lamentó una joven de Carapal de Guara, al sur de Tucupita.
La semana vigente que empezó el pasado lunes 3 de agosto y, que finaliza este domingo 9, corresponde a la semana de radicalización total en todo el país. Este recorta el horario laboral en los establecimientos y en la circulación de vehículos y peatones. Además, la prohibición del transporte público y privado.
Al igual del cierre de entidades bancarias y estaciones de servicio de combustible.