Las primeras informaciones señalan la habilitación de generador eléctrico de relevo en el hospital Luis Razetti de Tucupita en el momento que la energía eléctrica comenzó su fallar el pasado jueves 7 de marzo.
La población de la ciudad atraviesa una aguda situación de carencia, la reserva de alimentos llega a su tope final ante la falta de refrigeración, la total incomunicación, la desesperación de las madres ante el calor indiscriminado y la falta total de agua; es el balance que se presenta en Delta del Orinoco por el mega apagón que vive el país.
Sin embargo, de acuerdo a fuentes del área, se desconocen fallecimientos en el hospital Luis Razetti de Tucupita producto de la falla eléctrica.
La diputada al Parlamento Nacional, Larrissa González, miembro de la Comisión de Pueblos Indígenas de la Asamblea Nacional, fue enfática al señalar “hemos confirmado por medio de médicos que laboran en el hospital Razetti, que el centro de salud más importante de salud cuenta con una planta eléctrica que comenzó a funcionar en el mismo momento que se generó el apagón”.
De igual forma, la activista de derechos humanos, Luzmila Gil, aseguró la ausencia de pacientes fallecidos a raíz de la falla eléctrica que duró un poco más de 50 horas en el Delta.
Por su parte, Bernarda Suarez, exdiputada de la asamblea legislativa del estado Delta Amacuro, denunció la gravedad que vive el hospital Razetti de Tucupita y exige sea aperturada la emergencia del hospital que se encuentra sin funcionamiento “los pacientes están hacinados y en forma infra humana en una emergencia provisional” señaló la dirigente.
Esta información fue confirmada por el dirigente indígena Henrry Velázquez quien tiene un hermano en el hospital, al señalar la situación caótica que viven los pacientes en los pasillos y la emergencia improvisada.
Durante poco más de 50 horas, la población de Tucupita fue afectada por la falla eléctrica con impactos en el suministro de agua, la incomunicación total en las telecomunicaciones, el colapso de la reserva en los alimentos y la zozobra de la falta de información que mantuvo a la población sumida en una situación de angustia.
PRENSA KAPÉ KAPÉ