Como cosa curiosa este fin de semana la venta de pescado, carne y pollo estuvo escasa.
Las sardinitas, la más fiel de las compañeras de las mesas tuvieron muy poco protagonismo. Apenas si vendieron en un solo puesto y muy pocas.
Las carnicerías no tenían ni carne de res, ni pollo o cerdo.
Lo que si se llevó la mayoría de los compradores del mercado municipal fue las pepitonas.
Obligando a las amas de casa a hacer un cambio en el menú del fin de semana.
Yuca sobreabundó en el centro municipal hasta tres kilos por 100 Bs. S. vendieron desde los camiones.
No faltaron los vendedores informales como de costumbre.
Frutas y verduras, legumbres y mucho casabe se llevaban los compradores. Pero carne no hay.