“El Gobierno regional sabe que cada año las lluvias causan estragos en estas zonas y es verdaderamente lamentable que hasta ahora no tenga un plan de emergencia serio para evitar que tantas personas padezcan de lo mismo año a año”, sentenció
Tucupita.- La diputada ante la Asamblea Nacional (AN), por el estado Delta Amacuro, Larissa González, denunció este jueves la grave situación por la que atraviesan más de 10 mil afectados por la crecida del río Orinoco en esa región del país.
La parlamentaria dio a conocer la situación que se vive en comunidades fluviales de los municipios Tucupita, Casacoima, Pedernales y Antonio Díaz, cuya ubicación geográfica las hace más vulnerables en la temporada de lluvias.
“El Gobierno regional sabe que cada año las lluvias causan estragos en estas zonas y es verdaderamente lamentable que hasta ahora no tenga un plan de emergencia serio para evitar que tantas personas padezcan de lo mismo año a año”, sentenció.
Además de perder la mayoría de sus bienes como línea blanca y muebles, los afectados deben lidiar los problemas que traen consigo las inundaciones.
“Las enfermedades y el hambre se están afincando mucho más en esas zonas olvidadas por la mandataria local, muchos niños deshidratados a causa del vómito y fiebre, lesiones por hongos en la piel y diarrea son algunas de los males con que estos deltanos están obligados a lidiar por la desidia del régimen”.
González expresó: “Hace un par de meses advertí que esas zonas debían ser evacuadas para estos meses, porque el río tiende a desbordarse, con esto queda demostrado una vez más que quienes están al frente de las instituciones del país son incapaces de resolver los problemas de los venezolanos”.
Grietas en las compuertas del cierre
Otro problema que expone Larissa González, y el cual resulta aún más inquietante es el hecho de la falta de mantenimiento y las malas condiciones en la que se está actualmente el Sistema de Control de Inundaciones del Delta del Orinoco que es la infraestructura que mantiene el caudal del Orinoco al margen y evita que toda la ciudad se inunde.
Según expresa González “es un tema delicado, en las compuertas del cierre hay grietas y al pasar por ahí se puede observar claramente como el agua se cuela, es por eso que el Estado debe atender reforzar esta obra con suma urgencia para evitar que colapse y ocurra una catástrofe”.
Periodicodeldelta.com /Prensa Larissa González