En la misiva la CEV agregó que estos actos cometidos contra personas e instituciones «debe ser rechazados en todas sus vertientes»
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) expresó a través de un comunicado de prensa su rechazo a la violencia «venga de donde venga».
En la misiva la CEV agregó que estos actos cometidos contra personas e instituciones «debe ser rechazados en todas sus vertientes».
A su vez la CEV también se refirió a la situación de Venezuela, ante lo cual indicó que «el país está pasando por una situación muy delicada: se quiere instaurar una espiral de violencia».
Cabe destacar, que a juicio de la organización eclesiástica venezolana la aplicación de las leyes en el país se aplican para «enmarcarse en la arbitrariedad».
Igualmente destacó que la semana pasada la Comisión de Justicia y Paz de la CEV afirmaba: «las aprehensiones a parlamentarios, funcionarios o ciudadanos con base en indicios o presunciones de la responsabilidad penal, no conllevan a detenciones arbitrarias, tratos crueles o inhumanos, torturas o desapariciones forzadas, supuestos que atentan a todo evento contra la integridad física y psíquica de los venezolanos”.
En ese sentido, recordó que en un Estado, quien es privado de su libertad, se le debe resguardar «su derechos, su integridad física y psicológica, a las relaciones familiares y sociales, a la integridad moral, etc.. (…) Esto excluye desde luego, no sólo todo tipo de tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes, sino también las condiciones mismas de reclusión en situación de aislamiento, la completa imposibilidad de comunicación y la falta de contactos con otros seres humanos, que las más de las veces provocan graves sufrimientos psíquicos y físicos».
Por último, agregó que los privados de libertad. «La dignidad de la persona y los derechos fundamentales a ella inherentes no pueden negarse nunca. Ésta es la esencia última de la justicia».
Globovisión