La casi totalidad del territorio que controlaba el grupo yihadista en el este de Siria ha sido liberada.
La partida de una parte de los combatientes kurdos aliados de Estados Unidos en Siria hacia el enclave de Afrin, blanco de un ataque de Turquía, provocó una «pausa» en las operaciones contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), admitió este lunes el Pentágono.
La alianza árabe-kurda de las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) se debilitó a raíz de las acciones turcas contra la región de Afrin y la decisión de numerosos combatientes de la facción kurda de ese pacto, las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) de priorizar la lucha contra Turquía sobre el combate al EI.
La casi totalidad del territorio que controlaba el grupo yihadista en el este de Siria ha sido liberada pero algunos de sus combatientes permanecen atrincherados en el valle del Éufrates, cerca de la frontera iraquí.
«Las pausas operativas se producen regularmente por diversas razones», declaró el coronel Rob Manning, portavoz del Departamento de Defensa.
«La naturaleza de nuestra misión en Siria no cambió», agregó. «Esta pausa operativa no nos desviará de nuestro objetivo principal, el EI».
El comandante Adrian Rankine-Galloway, otro vocero del Pentágono, subrayó que Estados Unidos continúa sus bombardeos aéreos contra el EI y que ningún territorio había caído en manos yihadistas.
AFP